La limpieza bucodental y la importancia de la salud de tus dientes y encías
La limpieza bucodental, debe ser una parte ineludible de tu higiene diaria. Tus dientes y encías deben recibir un cuidado óptimo, ya que el contacto constante con alimentos y bebidas, puede dejar restos que deriven en la aparición de bacterias y estas en infecciones.
En este artículo te indicamos algunos aspectos de la salud bucodental que es importante que tengas en cuenta.
El sarro acumulado
Se recomienda siempre cepillarse los dientes porque si no se puede formar una placa bacteriana sobre nuestros dientes y encías. La calcificación de esta placa bacteriana es la que forma el sarro dental, una especie de película transparente sobre la que se depositan las bacterias.
Si lo identificas en una exploración visual, limpiar sarro acumulado no se puede conseguir mediante un cepillado tradicional, es necesario acudir a una clínica odontológica.
La limpieza de sarro acumulado se realiza mediante la técnica conocida como profilaxis, completamente indolora y de máxima efectividad, para unos dientes limpios y libres de sarro.
Limpieza periodontal y el cuidado de las encías
Si el sarro no es tratado, estamos abriendo la puerta a la gingivitis, una inflamación de las encías provocada por la presencia de bacterias en nuestra boca y dientes.
El problema principal de la gingivitis, aparte de un enrojecimiento de las encías, su inflamación y sangrado ocasional, es que a su vez puede evolucionar en periodontitis, una enfermedad grave en la salud dental.
La periodontitis es una infección que daña el tejido blando de las encías y puede destruir el hueso que se encarga de sujetar los dientes.
La limpieza periodontal se puede aplicar mediante curetaje en cuadrantes de la boca, con el fin de conseguir unas encías sanas y una progresiva desinflamación.
Sin embargo, una periodontitis tratada demasiado tarde puede hacer inevitable la pérdida de la pieza dental y requerir un implante o soluciones alternativas.
Por este motivo, tan importante es el cuidado de nuestros dientes mediante un cepillado correcto, como también el cuidado de nuestras encías.
Para mantener unas encías sanas y limpias, aparte del cepillado dental, podemos aprovechar las ventajas de seda dental o de cepillos interproximales.
Como complemento a nuestra limpieza bucodental, también podemos aprovechar los enjuagues o locutorios sin alcohol, ya que con ellos podemos llegar a zonas de la boca y entre los dientes, que no conseguimos con otros recursos.
Por descontado, un cuidado de las encías no se basa solo en la limpieza, sino también en la prevención. Evitar el consumo de tabaco, alcohol o café, nos ayudará a mantener una boca más saludable.
Y en el caso de no evitar su consumo, al menos extremar el cuidado de las encías tras el mismo, ya que son sustancias que pueden afectar directamente a la salud bucal.
A ellas se les complementa otros factores como enfermedades cardiacas o diabetes, entre otras; un sistema inmunitario debilitado; predisposición genética; así como cambios hormonales, por ejemplo durante el embarazo.
Importancia de un buen cepillado. Técnicas
La limpieza bucodental mediante un buen cepillado representa la mejor manera de prevenir todos estos problemas en nuestra boca y dientes.
Sin embargo, no todo el mundo conoce las técnicas más apropiadas para que este cepillado sea realmente eficaz. Estas son algunas de las más recomendadas:
- Técnica vertical: Cepillado con los dientes cerrados en movimientos verticales.
- Técnica horizontal: Igualmente con los dientes en contacto arcada superior e inferior, pero con movimientos horizontales.
- Técnica circular: Ideal para los más pequeños, consiste en aplicar movimientos circulares desde la encía hacia los dientes.
- Técnica Bass: Cepillado con una inclinación de 45 grados, con movimientos vibratorios en la encía y movimientos verticales hacia el exterior en los dientes.
En el caso de usar brackets, el cepillado debe realizarse con productos específicamente fabricados con compatibilidad para estos aparatos.
El cepillado se realiza de arriba hacia abajo, primero la parte interna y luego la posterior. En estos casos, el hilo dental es de máxima utilidad, para poder acceder a zonas que los brackets obstaculizan al cepillo.
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