¿Qué es la Piorrea?
Muchos pacientes sufren Enfermedad Periodontal o Piorrea y no son conscientes de ello. Desde la clínica dental de la Doctora Irene Morales Trescastro queremos hacer consciencia de que es un problema que se ha de tratar ya que puede conllevar a peores problemas dentales, como la pérdida de los dientes y también puede repercutir en la salud general si no se trata, como padecer graves problemas de corazón por poner un ejemplo.
¿Qué es la enfermedad periodontal o piorrea?
La periodontitis o también llamada piorrea hace referencia a un tipo de enfermedad periodontal. La piorrea es debido a una evolución de una gingivitis o inflamación de encías mal tratada. Se trata de una enfermedad grave e irreversible, dónde la lesión inflamatoria progresa hacia zonas más profundas de la encía y afecta al tejido óseo de soporte dental. De este modo, se infectan las conocidas como bolsas periodontales (espacio existente entre las encías y los dientes).
La placa bacteriana se extiende y crece por debajo de las encías. La respuesta natural de nuestro cuerpo es luchar contra estas bacterias mediante una respuesta inflamatoria, pero ésta puede llegar a la destrucción del propio hueso y tejido conjuntivo dental (encía y ligamento periodontal) que mantiene los dientes en su lugar.
Las enfermedades periodontales son diferentes patologías que afectan al periodonto, es decir a los tejidos que sostienen los dientes (la encía, el ligamento y el hueso que sostiene al diente). Las enfermedades periodontales son patologías infecciosas que son causadas en su gran mayoría por bacterias, pero también pueden ser causadas por la acumulación de placa, un origen vírico, fúngico, pueden ser producidas por una lesión o debidas a enfermedades sistémicas e incluso hay medicamentos que inducen a que se produzca una enfermedad periodontal.
Diferencia de Gingivitis y Periodontitis
Dentro de las enfermedades periodontales tenemos la gingivitis y la periodontitis (más comúnmente llamada piorrea).
La gingivitis podemos definirla como una inflamación de los tejidos de sostén que rodean los dientes, si no tratamos la gingivitis esta puede evolucionar y convertirse en periodontitis, donde está afectado el hueso periodontal.
Es importante recalcar que para que se produzca una periodontitis previamente el paciente ha tenido que padecer una gingivitis, pero esto no significa que todos los pacientes con gingivitis acaben padeciendo una periodontitis.
También tiene un componente genético importante presente en la persona que la padezca.
¿Cómo se produce?
Para poder explicar cómo se produce la periodontitis primero tenemos que explicar cómo se produce la gingivitis. La gingivitis es debida a un cúmulo de placa bacteriana que produce la inflamación de los tejidos periodontales, sangrado y en algunos casos dolor, (muchos pacientes no saben que padecen gingivitis porque son asintomáticos, es decir no sienten molestias).
Si no se trata la gingivitis y se deja que progrese, progresará a periodontitis.
Cuando hay periodontitis la infección de los tejidos periodontales no se queda únicamente en las encías, si no que afecta al ligamento periodontal y al hueso de sostén, por eso cuando los pacientes sufren periodontitis notan que se le mueven los dientes, porque pierden la sujeción que les proporcionaba el hueso.
¿Puedo llegar a perder los dientes?
Si. Si no se trata la periodontitis el hueso se verá afectado, iremos perdiendo altura de hueso hasta que el diente solo este sujetado por encía. Por este motivo es tan importante tratar las enfermedades a su debido tiempo.
Tipos de enfermedad periodontal
Existen dos tipos de periodontitis:
La periodontitis crónica, que es la más común y tiene una evolución lenta, mientras que la periodontitis agresiva tiene una evolución rápida desde su inicio.
Síntomas más frecuentes
Cuando tenemos periodontitis los síntomas más comunes son: el sangrado y la inflamación de las encías, las encías presentan una coloración más rojiza, movilidad dental (debido a la perdida de hueso), sensibilidad dental ya que se produce una retracción gingival, esto hace que nos veamos los dientes más largos, exponiéndose así muchas veces la raíz de los dientes.
Para evitar que se produzca hay que acudir a revisiones anuales y se recomienda hacerse también una limpieza dental anual también.
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